miércoles, 2 de agosto de 2017

2. ESPERAR EN EL SEÑOR DIOS TODO PODEROSO, PARA VER SUS PROMESAS CUMPLIDAS


Quisiera compartir con ustedes este hermoso mensaje que escribí en el año 2011 y no recordaba que lo había compartido en mi perfil en Facebook.  Espero en Dios que sea de gran bendición para ustedes.  Toda gloria y honra para el Santo de Israel. : )

Las consecuencias de ayudar a Dios 
Génesis 16

Dios es un Dios de pactos y Él cuando pacta con el hombre cumple, pero cuando Dios da promesas que se tardan optamos con cumplirlas nosotros mismos y es en donde nos metemos en problemas. Retrasamos las bendiciones cuando nos salimos del plan de Dios, nos adentramos a experimental situaciones adversas a consecuencia de nuestras decisiones y adoptamos actitudes negativas que nos afecta como cristiano y a los que nos rodean.

Es en este punto donde Dios tiene que intervenir y aun Dios utiliza nuestras “metidas de pata” para sus propósitos. En esta reflexión quiero hacer énfasis en actitudes que nos pueden llevar a tomar malas decisiones. Una es frustración, la otra es soberbia (menospreciar a otra persona) en estos puntos me ha inquietado el Espíritu Santo en especial la SOBERBIA que tanto daño hace al cuerpo de Cristo.

Dios obró rápido hablándome a través de Su Palabra en Génesis 16, que narra la relación entre Sara y su esclava egipcia Agar, donde no había respeto entre ambas. Dos mujeres frustradas por sus condiciones en aquel entonces. Sara por ser estéril (se decía que era una maldición) y Agar por ser esclava.

Hermanos (as) en Cristo, vayamos a la palabra Santa de  Yahweh (Jehová) en Génesis 16. Veamos que ocurrió antes de que surgiera el menosprecio.

GENESIS 16

Sarai mujer de Abram no le daba hijos; y ella tenía una sierva egipcia, que se llamaba Agar. Dijo entonces Sarai a Abram: Ya ves que Jehová me ha hecho estéril; te ruego, pues, que te llegues a mi sierva; quizá tendré hijos de ella. Y atendió Abram al ruego de Sarai. Sarai la esposa de Abraham se adelanto al plan de Dios dejándose llevar por su frustración, a pesar de que tenía la promesa de Dios con nombre Isaac.

Si lees con cuidado el versículo 2 donde dice… “ya ves que Jehová me ha hecho estéril”, Oh! Dios! Sarai le echó la culpa a Dios!!!! Qué fácil es buscar a quien culpar. Que terrible era Sarai y que muchos hay con esta actitud en el cristianismo, cuando ven que nada le sale bien dicen que Dios tiene la culpa.

Luego, Sarai, le ruega a su esposo Abraham que se allegara a su sierva para que ella tuviera un hijo. Sarai tomó el asunto en sus manos dejándose llevar por una práctica común en esa época, la mujer estéril era avergonzada por su familia y a menudo la misma familia o el mismo pueblo les decía que usara a una sustituta o a una de sus siervas. Hay muchos cristianos que se dejan llevar por lo que otros opinan o se dejan llevar por COSTUMBRES y no por la voluntad de Dios.

Dice la palabra que Abraham atendió lo que su esposa le pidió hacer, él estaba actuando de acuerdo con la costumbre de esos tiempos y a la vez conforme con los CAPRICHOS de Sarai, su esposa. Pero…esta ACCION era una falta de FE en la PROMESA de Dios.

3 Y Sarai mujer de Abram tomó a Agar su sierva egipcia, al cabo de diez años que había habitado Abram en la tierra de Canaán, y la dio por mujer a Abram su marido.

Vemos como Sarai actuó rápido con su plan no quiso alargar mas el tiempo (…al cabo de diez años…) (también puedes leer Génesis 12:5). Sarai NO CONCEBÍA EN SU CORAZÓN que podía tener un bebé. Esto nos sucede cuando queremos ocupar el lugar de Dios en situaciones y tratamos de usar nuestros propios medios para que se cumpla una promesa de Dios y esto NO va de acuerdo a las INSTRUCCIONES ESPECIFICAS del Señor Dios Todopoderoso.

En este caso la mayor prueba de Sarai y Abraham fue EL TIEMPO. Ellos tenían que hacer algo sencillo...ESPERAR. Ambos primero tenían que concebir en sus corazones para luego concebir en el vientre de Sara. No podemos dejar que la TENTACION de hacer algo por nuestra cuenta interfiera en los planes de Dios. Aunque para Sarai este “PLAN” parecía completamente inofensivo.

4 Y él se llegó a Agar, la cual concibió; y cuando vio que había concebido, miraba con desprecio a su señora.

¡EL DESQUITE! Agar comenzó a sentir desprecio por su ama, al concebir, Agar vio la oportunidad de desquitarse de Sara mirándola con menosprecio. Pero… a Sarai le dolió, que su criada la mirara con desdén (significa: desprecio, menosprecio, soberbio). Entró en Agar la soberbia, (raíz de todo pecado) esto siendo provocado por Sarai, siendo obvio por tratar a Agar como esclava. Este es un ejemplo de que tenemos que tratar a los demás con RESPETO.

Ejemplo: En la iglesia le dieron un puesto a un hermano y ese hermano trata con menos precio a otros hermanos en la fe quienes están bajo su cargo, pasa el tiempo y el hermano que fue menospreciado se supera y lo nombran pastor, ahora este pastor NO puede ver su cargo como una oportunidad para desquitarse del hermano que le menospreció. No podemos devolver mal a los que nos acosan, tenemos que orar por ellos siguiendo las enseñanzas de Jesús.

5 Entonces Sarai dijo a Abram: Mi afrenta sea sobre ti; yo te di mi sierva por mujer, y viéndose encinta, me mira con desprecio; juzgue Jehová entre tú y yo.

A pesar que Sarai fue la que planeó que Agar tuviera un hijo de Abraham (su esposo), luego culpó a Abraham por las consecuencias. ¡Muchas veces es más fácil culpar a alguien de sus frustraciones que reconocer su error y pedir perdón!

6 Y respondió Abram a Sarai: He aquí, tu sierva está en tu mano; haz con ella lo que bien te parezca. Y como Sarai la afligía, ella huyó de su presencia.

Por Sarai apresurar el plan de Dios y al ver los resultados negativos comenzó a descargar su frustración en Agar y esto IMPOSIBILITÓ LA ARMONÍA y LA CONVIVENCIA entre ellas, motivando a que Agar huyera. 

La criada de Sarai vio un escape perfecto, huir, ella pensó que era la mejor solución en vez de enfrentar la situación.

Los versículos 7 y 8: Y la halló el ángel de Jehová junto a una fuente de agua en el desierto, junto a la fuente que está en el camino de Sur. Y le dijo: Agar, sierva de Sarai, ¿de dónde vienes tú, y a dónde vas? Y ella respondió: Huyo de delante de Sarai mi señora. 

Aquí vemos como Dios tuvo que intervenir mediante el ministerio angelical. Y le da instrucciones a Agar de volver a donde Sara y le da promesa con el hijo que tenía en su vientre cumplida en el pueblo árabe dueños del petróleo del mundo. 

Versículo 9, “Y le dijo el ángel de Jehová: Vuélvete a tu señora, y ponte sumisa bajo su mano”. El ángel de Jehová le dijo que regresara y que se sometiera porque Dios tenía propósito con ella y el muchacho, siendo Agar obediente a la voz de Dios. 

Ahora veamos la promesa que Dios le dio a Abraham y a Sara, cumpliéndose.

Génesis 21

Nacimiento de Isaac

1 Visitó Jehová a Sara, como había dicho, e hizo Jehová con Sara como había hablado. 
2 Y Sara concibió y dio a Abraham un hijo en su vejez, en el tiempo que Dios le había dicho. 
3 Y llamó Abraham el nombre de su hijo que le nació, que le dio a luz Sara, Isaac. 
4 Y circuncidó Abraham a su hijo Isaac de ocho días, como Dios le había mandado. 
5 Y era Abraham de cien años cuando nació Isaac su hijo. 
6 Entonces dijo Sara: Dios me ha hecho reír, y cualquiera que lo oyere, se reirá conmigo. 
7 Y añadió: ¿Quién dijera a Abraham que Sara habría de dar de mamar a hijos? Pues le he dado un hijo en su vejez. 

Hermanos tenemos que esperar en el Señor para ver sus promesas cumplidas. Hay que someterse a la voluntad de Dios, no a la de nuestros corazones.

Maria I. Mestre
profetamariaimestre@gmail.com
Yom Teruah Ministries®
(Pentecostales Reformados)
Publicado el día 22 de mayo de 2011 en Face Book


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